Biografía de Rufino Tamayo, nació el 26 de agosto de 1889 en Oaxaca y falleció el 24 de junio de 1991 en la Ciudad de México. Fue un pintor que se convirtió en una figura sumamente importante en el siglo XX, alcanzando una difusión internacional. Participó en el movimiento muralista que tiene su florecimiento entre las dos guerras.

¿Quién fue Rufino Tamayo?

¿Quién fue Rufino Tamayo? Hijo de Ignacio Arellanes, que posee el oficio de zapatero; y de Florentina Tamayo, costurera de Oaxaca; ambos indígenas zapotecas. Esta pareja se separa en 1904 y él reside con su madre hasta 1911, cuando ella fallece. Con esto su tía Amalia lo cuida y juntos se trasladan a la Ciudad de México.

Desde muy joven se manifiesta su vocación por el arte y el dibujo. Comienza su formación en una academia de artes conocida como “de San Carlos”, pero termina por dejar la institución. Entonces emprende un camino que lo lleva por diversos rumbos de estudio, acercándose al arte del país y a lo contemporáneo.

Expone su trabajo por primera vez en 1926 y en esto ya despliega aquello que le caracteriza de manera general, así como su evolución de un primitivismo indigenista al constructivismo y surrealismo.

A la par asume puestos administrativos y se sumerge en un quehacer didáctico. Posteriormente expone sus obras en una institución artística ubicada en Nueva York, Estados Unidos. Luego labora como profesor, y en el año de 1932 asume la dirección de un departamento de arte que pertenece a la SEP.

Acepta una oferta para impartir clases en una reconocida escuela de arte en Nueva York en el año de 1938; y permanece en esta ciudad por un periodo de casi veinte años, la cual además es de suma importancia en su trayectoria del artista.

Es precisamente en ésta en donde concluye su proceso de formación, y con el paso del tiempo deja atrás los conceptos artísticos europeos. Entonces da comienzo a un recorrido que abunda en creaciones originales y en una notable exploración que despliega novedosos elementos pictóricos.

También logra definir su estilo mientras se encuentra en este país. Él muestra un alto grado de rigurosidad en cuanto a lo estético y su técnica tiende a revelar un nivel elevado de perfección. De igual forma modifica objetos recargándose en diferentes elementos, los cuales tienen su estructura en la rica historia de México previa a la conquista.

Se destaca en su biografía que realiza un mural, el primero de su carrera, en el cual se manifiesta apartado de las cuestiones políticas. Entonces, se le acusa de ser apolítico, aunque esto no puede afirmarse en su totalidad, ya que su propuesta en sí toma un camino innovador, en donde busca plasmar sus raíces indígenas y su unión con lo prehispánico.

Vida de Rufino Tamayo

La vida de Rufino Tamayo trae consigo creaciones de suma originalidad, en las cuales se conjuntan las tradiciones más vivas de México y características muy personales de gran potencia en la expresión.

La parte más importante de su producción está en la pintura de caballete, en donde incluye naturaleza muerta. Y obtiene gran cantidad de premios en su trayectoria artística, por parte de organizaciones que pertenecen a diferentes países.

Realiza un fresco en 1952 en el edificio de Bellas Artes, ubicado en la capital de México; y sus obras también son bien recibidas en otros lugares. En efecto, en Houston lleva a cabo su obra muralista más sobresaliente conocida como “América”, y prosigue haciendo otras muchas creaciones de este tipo. En 1957 adquiere un nombramiento especial en Francia y en los sesenta regresa a México.

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