Pedro Domínguez Murillo

Biografía de Pedro Domingo Murillo. Pedro Domingo Murillo nació el 17 septiembre 1757, y falleció el 29 enero 1810 en Suri, La Paz. Fue un patriota es boliviano que lideró la sublevación independentista de 1809.

¿Quién fue Pedro Domingo Murillo?

¿Quien fue Pedro domingo Murillo? Sus padres fueron los criollos Juan Ciriaco y María Ascencio Carrasco. Inició sus estudios en el seminario de San Carlos, luego estudió derecho en la Universidad Francisco Xavier de La Plata, Chuquisaca, pero no pudo llevar a término su carrera. En el año 1788 falsificó documentos para dar su examen de licenciatura y obtener el título de abogado, pero lo descubrieron y el trámite se anuló.

En el año 1785 se casó con doña Manuela de la Concha con la que tuvo dos hijos: Joseph Manuel y Franciscana Paula Murillo. Era un hombre de letras, y cultura, tenía una biblioteca con libros de pensadores franceses, filósofos griegos, libros de minería, ciencias naturales y también manuales históricos.

Se enroló primeramente en las milicias realistas. Luchó contra la rebelión de Tupac Kitari, evento en el que se destacó lo suficiente como para recibir el grado de Teniente de Milicias.

Luego se retiró un tiempo para dedicarse al comercio y a la minería con el fin de cuidar de su familia.

En su época, era admirado como pensador, polémico y gran crítico de las leyes españolas. La fama de su formación y cultura le dieron la imagen de escritor de proclamas y discursos.

Se puede destacar en su biografía, su participación en la conspiración de 1805 contra los españoles. Fue sometido a juicio, pero nada pudo comprobársele, saliendo luego en libertad. Ese fue solo el primero de los hechos a través de los cuales lucharía a favor de la independencia de su país.

Vida de Pedro Domingo Murillo

La vida de Pedro Domingo Murillo, fue la de un patriota que dio su vida por la causa de la libertad. La conspiración libertaria de 1809, contó con su participación junto al párroco Medina, Patiño, Lanza, Catacora, Monje y Bueno.

Cuando triunfó la revuelta, el 16 de julio de 1809, fue nombrado presidente de la junta Tuitiva, junta de defensa de la ciudad, y jefe militar. Fernando de Abascal en ese momento virrey del Perú envió tropas numerosas para reprimir a los sublevados.

Se enfrentó al ejército de Goyeneche en Chacaltaya, el 25 de octubre de 1809. Al ser derrotado se refugio en Zongo, cerca de la paz donde Goyeneche lo capturó.

Murillo intentó huir pero fue apresado y sometido a juicio sumario. Este coronel español lo condenó a ser ahorcado y el 29 enero de 1810 se le cortó la cabeza, luego fue expuesta en una picota como muestra de escarmiento a los sublevados.

Un momento antes de su ejecución pronunció las siguientes palabras: «Compatriotas, yo muero, pero la tea que dejo encendida nadie la podrá apagar, ¡viva la libertad!».

De este modo se convirtió en uno de los próceres más patrióticos de su país, y su ejemplo es siempre es recordado como un hombre de gran valor e integridad.

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