Biografía de Justino

Biografía de Justino, nació en el año 100 en Flavia Neapolis, Imperio Romano y falleció en el año 168 en Roma, Imperio Romano. Justino Mártir es considerado uno de los primeros cristianos, el cual es reconocido por haber sido pionero en la defensa y difusión de la tradición cristiana según el Antiguo Testamento.
Se le conoce por su prolífica obra, de la cual destaca su apología Diálogo con el Judío Trifón y Primera Apología de Justino Mártir.

¿Quién fue Justino?

¿Quién fue Justino? Poco se sabe de los datos exactos de la vida de este mártir, pero se tiene entendido que pudo haber sido samaritano, aunque hay más certeza de que se formó en una familia griega y de tradición pagana.
En sus primeros años de vida se especializó en filosofía, especialmente mediante el estudio de las ideas de Platón; pero más adelante se convirtió al cristianismo y comenzó a difundir sus enseñanzas.
Se inició en la apología cristiana en la región de Éfeso cuando gobernaba Adriano; en lo adelante se convenció de que esta era la verdadera filosofía, razón por la cual dedicaría el resto de su vida a trasmitirla.
Se destaca de su biografía, Justino es visto desde el punto de vista histórico como una de las imágenes de la iglesia antigua; que además sirve de referencia a la costumbre de los cultos desde sus inicios. Símbolos como compartir el pan y otras oraciones de la comunión de los apóstoles; partieron de las ideas de Justino, a partir de estas también se originó la famosa plegaria eucarística que relaciona a los cristianos modernos con los antiguos.
Justino era un apologista que llegó a escribir suficientes obras detallando la fe cristiana de la antigüedad, pese a que creció en una localidad cuya mayoría de habitantes eran paganos. Cuenta que un día junto al mar un anciano le recomendó que leyera la biblia si quería conocer y acercarse más a Dios.
En lo adelante, también se identificó con las vidas de los mártires, porque se convenció de que si esas personas morían de manera trágica por defender su fe, seguramente se trataba de una muestra clara de que valía la pena morir como cristiano.
Cuenta en sus escritos que en la biblia consiguió todas las explicaciones y satisfizo sus necesidades espirituales, más que con cualquier otro libro. En consecuencia, se dedicó a escribir sobre esta religión porque sabía que los paganos no la habían conocido porque los escritos sobre esta, eran escasos para aquel entonces.
Por lo tanto, su propósito era lograr que a través de una escritura que explicara de manera filosófica los beneficios de ser cristianos, todos los paganos que la leyeran, la comprendería y la seguirían sin dudarlo.

Vida de Justino

La Vida de Justino, la intención de este laico por difundir la fe cristiana estaba basada en su propia experiencia. Usaba como referencia a la biblia para fundamentar que la sabiduría debe ser compartida para que no sea inútil a quien la posee. En consecuencia, se dedicó a recoger en sus apologías, todas aquellas evidencias que el libro sagrado puso en sus ideas para abogar por la religión cristiana.
Justino viajó por muchas ciudades y países, usando las vestimentas propias de los filósofos para llevar sus ideas a los paganos, con quienes inició varios debates religiosos. De igual manera se acercó a judíos y herejes por igual, con el propósito de que todos se convencieran de la santidad de la religión cristiana.
En Roma tuvo a un rival de cuidado, Crescencio, quien lo denunció como cristiano ante las autoridades, que para ese entonces consideraban un delito identificarse en público como cristiano. Otro de sus delitos fue llevar sus apologías, nada menos que el emperador, para ese entonces Antonino Pío y también al hijo de este, Marco Aurelio.
En consecuencia, cuando Justino se instaló en Roma fue martirizado bajo el reinado de Marco Aurelio y la autoridad local de Junio Rústico. La iglesia católica celebra su día el 14 de abril.