Biografía de Froilán Díaz, su nombre completo es Froilán Díaz de Llanos, nació en el siglo XVII en León y falleció en el año de 1709 en Madrid. Fue un sacerdote de la orden dominica, que desempeñó su labor con el monarca Carlos II. Su vida se rodeó de problemáticas al asegurar que dicho rey se encontraba bajo un embrujo, y por otra parte también tiene que enfrentar persecución por parte de la Inquisición.

¿Quién fue Froilán Díaz?

¿Quién fue Froilán Díaz? Se dedica a impartir clases en una institución de nivel universitario, y mientras desempeña tal labor consigue acercarse a Carlos II, quien opta por convertirlo en su más apegado elemento en cuestiones religiosas. De manera específica él toma un lugar preponderante en la vida del rey, al ser su confesor oficial desde 1698.

Sustituye a la persona que anteriormente ocupa este puesto al lado del monarca, y además consigue ser parte principal en la asamblea de la Inquisición. Al colocarse como una figura de confianza, su palabra se vuelve contundente y efectúa diversos actos de demasiada rudeza.

Se destaca en su biografía que en relación a esto, él asegura que las enfermedades de su majestad se deben a un encantamiento. Es tal su afirmación al respecto que para alejar el embrujo, comienza a realizar una serie de exorcismos al soberano.

Este “proceso” tiene lugar por el periodo de un año, y es vigilado por un inquisidor llamado Juan de Rocabertí. Los dos comienzan a establecer contacto con los espíritus que están en el interior del monarca y estos les revelan la información que buscan.

Dichos seres les confirman la condición del rey, diciendo que él está sumergido en un embrujo y además señalan que los culpables de tal hecho se encuentran en su propia corte. Declaran que los ejecutores del sortilegio son demasiado relevantes, marcando a la reina, su propia esposa, como la principal causante del problema.

La reina Mariana escucha entonces las terribles incriminaciones que se le adjudican y con ello demanda que Froilán sea apartado de su cargo y que alguien más le reemplace. De esta forma Carlos lo sitúa en Ávila, para que se encargue de la diócesis de dicha ciudad.

Sin embargo, su antiguo colaborador Rocabertí fallece y accede a su lugar un hombre que le complica su establecimiento y avance. Y la situación empeora cuando éste opta por apresarle por motivos de herejía.

Así es puesto en manos de la Inquisición, y después de experimentar un juicio es absuelto de las faltas que se le imputan, ya que no se encuentran pruebas para considerarlo culpable y mantenerlo prisionero.

El religioso que lo lleva hasta este punto se llama Baltasar de Mendoza y al ver el resultado de toda su empresa, se manifiesta en contra. Presto para implantar sus deseos jubila a una serie de consejeros de manera injusta, exilia a un secretario y determina que Froilán sea confinado en la ciudad de Valladolid.

Antes de que esto ocurra, Díaz consigue escapar a la capital de Italia, pero no logra llegar muy lejos y es arrestado en dicho país, para luego ser enviado de regreso a España. Tiene que enfrentar otra vez el sistema inquisitorial, aunque de nueva cuenta es indultado.

Vida de Froilán Díaz

La vida de Froilán Díaz se ve involucrada en asuntos muy delicados con respecto a la realeza. Él efectúa ciertas acciones que lo terminan perjudicando en gran manera, ya que al ser el sacerdote real declara que la reina ha hecho un conjuro sobre su esposo Carlos II. 

Con esto queda fuera de la corte y entonces comienza a vivir una serie de persecuciones provocadas por Baltazar de Mendoza. La Inquisición los juzga en dos ocasiones en las que resulta absuelto; sin embargo es capturado una tercera vez y se le apresa en un colegio de la capital española. Después del fallecimiento del rey, Díaz es liberado por completo de cualquier cargo.

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